VIRGINIA – El gobernador de Virginia, Glenn Youngkin, anunció este jueves una propuesta para prohibir las llamadas «ciudades santuario» en el estado.
Según Youngkin, las localidades que adopten estas políticas perderían financiamiento estatal.
Una «ciudad santuario» es una jurisdicción que tiende a proteger a inmigrantes indocumentados de ser deportados, incluso tras cometer un delito.
«Esta propuesta exige que las fuerzas del orden locales y los oficiales de las cárceles cumplan completamente con las órdenes de detención de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. (ICE) y notifiquen a ICE 48 horas antes de liberar a un inmigrante ilegal que haya cometido un crimen», señaló la oficina del gobernador en un comunicado.
La medida también establece que el director del Departamento de Servicios de Justicia Criminal de Virginia retendrá fondos a las localidades con políticas de ciudades santuario, así como los pagos a cárceles locales y regionales. Youngkin destacó que localidades como Richmond han implementado políticas que, según él, contravienen esta propuesta.
«Debemos priorizar la seguridad de los ciudadanos del estado y evitar que las localidades devuelvan a las calles a criminales que ingresaron al país de manera ilegal, quienes podrían cometer más delitos», afirmó Youngkin.
El gobernador también citó un caso reciente en Herndon, donde una mujer fue violada en un sendero por un inmigrante indocumentado con un historial criminal. «Las políticas de santuario en el condado de Fairfax permitieron que este criminal regresara a las calles», aseguró.
Antes de que esta propuesta pueda convertirse en ley, deberá pasar por la Asamblea General de Virginia en 2025, actualmente controlada por los demócratas.