WHEATON, MD – Melvin Chávez, de 31 años, originario de Honduras y recién llegado a Maryland desde Texas, murió abatido por la policía.
Sobre los hechos las autoridades informaron que, el pasado sábado 21 de septiembre, minutos antes de las 7:50 p.m., la tranquilidad del suburbio de Wheaton Glenmont, en el condado de Montgomery, fue interrumpida por un llamado urgente a la policía. «Un hombre ebrio quiere pelear con la gente», anunciaba la operadora, enviando a los oficiales a una vivienda en Janet Road. Lo que comenzó como una disputa vecinal, terminaría en tragedia.
Según informaron las autoridades, cuando los oficiales llegaron al lugar, encontraron a Chávez en el patio de una casa, aparentemente armado con lo que creyeron era un cuchillo.
A pesar de las órdenes para que soltara el objeto que sostenía, Chávez ignoró los gritos de los oficiales. Según sus familiares, el no entendió lo que el policía le estaba diciendo en ingles.
Cuando Chávez comenzó a cruzar la calle, uno de los oficiales le disparó fatalmente. Sin embargo, lo que Chávez tenía en las manos no era un cuchillo, sino un tenedor de asar.
Chávez, quien había llegado a Maryland en busca de trabajo para ayudar a su madre en Honduras, estaba buscando ayuda para usar una desbrozadora la fatídica noche.
De acuerdo con los relatos de su familia, los vecinos se negaron a ayudarlo, lo que desencadenó una discusión que, combinada con el estado de embriaguez de Chávez, escaló rápidamente.
Las autoridades han sido cautelosas al proporcionar detalles, mientras la oficina del Fiscal General de Maryland investiga si el uso de la fuerza letal fue justificado.
La grabación de las cámaras corporales de los oficiales, que podría arrojar luz sobre lo ocurrido, será revelada en aproximadamente 20 días.
Mientras tanto, la familia enfrenta la dolorosa tarea de organizar el regreso del cuerpo de su sobrino a Honduras, donde su madre espera respuestas que nadie parece tener.