STAFFORD, VA – Walter Sánchez Amaya, un joven de 24 años originario de Annandale, protagonizó un incidente vial en Stafford, Virginia, que pudo tener consecuencias mucho más graves.
La madrugada del pasado 17 de noviembre, Sánchez no solo decidió conducir bajo los efectos del alcohol, sino que también intentó evadir su responsabilidad mintiendo a las autoridades sobre lo ocurrido, dijeron las autoridades.
El accidente ocurrió alrededor de las 3:36 a.m., cuando el Honda que conducía Sánchez estaba detenido de manera peligrosa, parcialmente en el arcén y parcialmente en el carril derecho de la Richmond Highway.
La conductora de un Chevrolet que transitaba por la vía notó la posición riesgosa del Honda, pero antes de poder reaccionar, el vehículo aceleró de manera abrupta e impactó su auto, provocando que este terminara volcado.
Cuando llegaron los agentes de la Oficina del Sheriff del Condado de Stafford, Sánchez alegó que un supuesto conocido llamado «David» estaba manejando su vehículo y huyó tras el accidente. Sin embargo, testigos en la escena desmintieron su versión, asegurando que él estaba al volante en el momento del choque.
Los errores de Sánchez no terminaron ahí. Al ser interrogado por las autoridades, admitió haber consumido al menos tres cervezas Modelo y en su auto se encontró una botella rota de Heineken.
Los agentes confirmaron que mostraba claros signos de intoxicación. Además, una revisión de antecedentes reveló que tenía una orden de arresto pendiente en Maryland, complicando aún más su situación legal.
A pesar de la gravedad del impacto, la víctima del accidente sufrió lesiones menores y fue trasladada al hospital como medida preventiva.
Sánchez, en cambio, fue detenido y trasladado al Centro Regional de Detención de Rappahannock, donde permanece sin derecho a fianza bajo cargos de manejar bajo los efectos del alcohol y ser fugitivo de la justicia.